Un sorbo de distracción

No paro de pensar en lo que pasó ayer. Sabes muy bien que no soporto que te burles de alguien, sobre todo si es alguien que no hizo ningún mal y sólo te refieres a algo tan superficial como su aspecto. Te digo que espero algo más de ti -y NO de los demás-y de tu actitud, pero creo que debería pensar que me equivoco si espero “ese” algo más. Pero siento que no me equivoco, porque sé que no es tema desconocido. – Me cuesta explicar todo claramente- son las respuestas, es la sensación de que dos personas se rían de ti y de alguien más –importante para ti- en tu misma cara. No creo en la complejidad de esa frase. ¿Y sabes porqué? Mira, es bien simple, se trata solamente de respeto. Y te digo y te repito YO NO TENGO LA ÚLTIMA PALABRA, lo sé y lo tengo tan claro como el agua. Pero en mi realidad hay cosas correctas e incorrectas, y es dentro de las incorrectas donde yo ubico el reírse y burlarse de una persona, con mayor razón si esa persona en cuestión es alguien a quien yo le tengo un cariño especial. Es lo mismo en tu caso, y con tu ejemplo (con lo/la cual sueles comparar todo)… Aquí voy una vez más, yo no me burlo, y si tengo una opinión te la digo en la cara, no me burlo feamente de esa persona mucho menos si sé que no es agradable para ti y cuando hay que parar, lo hago. A eso le puedo agregar la rabia que me dieron tus respuestas: “para tu desgracia, yo me reiré de todo lo que diga él, mucho más si estoy tomando…” De verdad pensé que no eras tú. Alguien te cambió en ese segundo y esas palabras –pensé- no son tuyas. Tristeza. El respeto se pierde en ocasiones y eso lo califico dentro de lo incorrecto en mi vida, mi realidad, mi burbuja, mi enseñanza. Mis ojos rojos no son de rabia, ni mucho menos de no sentir nada. Si supieras todo lo que siento, te podrías dar cuenta y –creo que quedaría claro- que no soy una roca, ni por dentro ni por fuera. Jamás me habían dicho eso. Hoy mismo alguien gdijo que era “freak” que me tocara alguien “llorón” a MÍ… FERNANDA PERALTA, uno de los seres más sensibles y corazón de esponja – que tiende al quiebre recurrentemente -. Soy de hierro para ti… ¿por mis ojos rojos, porque no lloro o por mi actitud? Te contaré algo. Es bastante extraño cuestionarme el porque –ahora- no me brotan las lágrimas con la facilidad que lo solían hacer hace un tiempo atrás. Hasta el momento era extraño y hasta algo de lo que me sentía orgullosa, pero como sé que me conoces bastante – esperas un llanto o algún indicio de haber decidido- pero nada de eso pasa. Me creerías si te digo que todo eso ocurre cuando te miro con mis ojos rojos de “rabia”, de frío o calor como piensas. Presiento que no me creerás lo que te acabo de contar. Pero es así. No deja de ser extraño y poco usual en mi, alguien que solía actuar con el corazón y no con la cabeza. Aunque eso no creo que haya cambiado, no quiero mezclar cosas que no son misturables. Pienso que tal vez te miro así por la rabia del momento, sí, eso no lo niego. Es el momento. Posiblemente unas simples palabras bastarían para borrar todo… "no fue mi intención"… Pero no, y es por eso que te miro así de esa manera que no controlo, sin embargo te amo y te extraño aún estando contigo –como suele suceder- . Luego volver a leer que no has cometido -a tu parecer- nada incorrecto. Cierro los ojos y un tremendo dolor de cabeza que me persigue hace mucho tiempo, me atrapa nuevamente, muevo mi cabeza en forma de negación y resignación, pena y rabia nuevamente. No dejo de pensar en ayer y vuelve esa sensación de no comprensión. Hoy, después de levantarme con una sensación amarga, vuelvo a recordar todo –imposible sacarlo al menos un segundo de mi cabeza- y se aprieta la garganta, hay algo que contiene el llanto. Salgo. Camino a mi destino, te mando un mensaje para decirte, tristemente, que te amo y un “discúlpame” final. Luego de eso, me convenzo para no cuestionar mis actos espontáneos. Pero luego me pregunto el por qué de esa disculpa… y pienso que quizás fue por el enojo de extensa duración o algo así. No sé si estoy en lo correcto, ya me da igual. Pues está hecho, y sería muy tarde para cualquier cosa. Solo se que nada sé. Y así, cada uno en su postura. Y crece la pena, la tristeza y las ganas de que esto no hubiese sucedido, así al menos estaría cuestionándome lo perfecto de esta relación, que suele ser más dulce que estos sorbos de amargura. te amo inmenso...